En Lebrija, las ramas de un árbol enfermo acabaron con una caseta de comidas en la noche del pasado miércoles 17 de julio. Ahora sólo quedan los electrodomésticos aplastados y grandes pedazos de madera en el negocio que estaba ubicado al frente de la estación de gas de Translebrija a la salida del municipio.
Isabel Barbosa es la comerciante que perdió todo. Según ella, “los propios trabajadores de la Electrificadora de Santander que venían a comer aquí, me aconsejaron que reportara el riesgo que significaba el árbol”. Ella se dirigió a las oficinas de la Essa y logró agendar una visita que se iba a dar entre el 7 y 11 de julio.
Sin embargo, cuando llegó la fecha, mediante una llamada se le informó que dicha cita se reagendó para el próximo viernes 16 de agosto. Esa comunicación se dio días previos del desprendimiento del individuo arbóreo.
El cuñado de Barbosa, Eliseo Hernández fue quien alertó a las autoridades del desprendimiento de las pesadas ramas. La alcaldía de Lebrija, mediante la Oficina de Gestión de Riesgo, taló las ramas caídas y las evacuó de la zona.
Casi una semana después de los hechos, la comerciante continúa en búsqueda de ayuda debido a que se encuentra sola. Hace seis meses es viuda y sus dos hijas ya no viven con ella, la caseta era el único medio que le daba el sustento. Si desea ayudar a Isabel, puede comunicarse al número 3153495389.
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