El viernes 13 ha sido durante mucho tiempo un día que evoca temor y superstición en diversas culturas alrededor del mundo. Esta fecha, temida por muchos, tiene sus raíces en una combinación de creencias religiosas, eventos históricos y la cultura popular. Desentrañar el origen de esta superstición nos lleva a explorar una diversidad de historias y anécdotas que se han tejido a lo largo de los siglos.
Religión, mitología e historia
Uno de los primeros y más prominentes orígenes de la superstición del viernes 13 proviene de la tradición cristiana. El número 13 se considera de mala suerte debido a su asociación con la Última Cena, donde Jesús cenó con sus 12 apóstoles. Judas Iscariote, el traidor que entregó a Jesús, era el decimotercer comensal. Asimismo, la crucifixión de Jesús se llevó a cabo un viernes, lo que añade una capa adicional de desgracia al día en cuestión.
Otra teoría se remonta a la mitología nórdica. En un banquete en el Valhalla, el paraíso de los dioses, 12 deidades estaban presentes hasta que Loki, el dios del mal y el caos, llegó sin invitación como el decimotercer invitado. Este provocó la muerte de Balder, el dios de la alegría y la felicidad, lo cual sumó al mundo en la oscuridad. Este evento consolidó la idea de que el número 13 trae desgracia.
Una fecha que ha contribuido significativamente a la mala fama de esta combinación es el viernes 13 de octubre de 1307, cuando el rey Felipe IV de Francia ordenó la captura y tortura de los Caballeros Templarios. Miles de estos servidores fueron arrestados, y muchos de ellos ejecutados bajo cargos de herejía. El evento fue tan traumático y significativo que perduró en la memoria colectiva como un día de infortunio.
Cultura pop
El viernes 13 también ha sido perpetuado en la cultura moderna a través de la literatura y el cine. El libro Friday the 13th de Thomas William Lawson, publicado en 1907, popularizó la superstición en el mundo anglosajón mediante la historia de un corredor de bolsa que provoca el caos en Wall Street en un viernes 13.
Sin embargo, fue la saga de películas de terror Viernes 13, iniciada en 1980, la que cimentó esta fecha en la cultura popular. Estos largometrajes, centrados en la figura del asesino Jason Voorhees, contribuyeron significativamente a la asociación de la fecha con el terror y la mala suerte.
Consecuencias en la sociedad
La razón por la cual estas supersticiones han persistido a lo largo del tiempo puede estar arraigada en la naturaleza humana de buscar patrones y asignar significados. En sociedades antiguas y modernas, la necesidad de explicar y prever el infortunio ha llevado a la creación de innumerables mitos y supersticiones. Estas creencias ofrecen una forma de afrontar la incertidumbre y el miedo, y aunque carecen de una base lógica, tienen un profundo impacto en el comportamiento humano.
La combinación de viernes y el número 13 ha dado lugar a una fobia específica llamada friggatriscaidecafobia (por Friday, ‘viernes’ en inglés, que procede del nombre de la diosa vikinga Frigg; en tanto, triscaidecafobia es el miedo irracional al número 13).
Muchas personas evitan realizar actividades importantes en este día, como bodas, viajes o reuniones de negocios, por temor a que algo salga mal. En algunos países, es común que los edificios omitan el piso 13, por lo que saltan directamente del 12 al 14.