Alexánder Sánchez Montes, de 45 años, fue hallado muerto con signos de tortura a tempranas horas de este viernes en su vivienda del barrio Siete de Agosto, en Barrios Unidos. En relación con estos hechos, hay una persona capturada, pero al parecer otra estaría involucrada. Su familia, en medio del dolor, clama por justicia.
“Hace casi un mes falleció mi padre. Hace unos días, el esposo de mi hermana también murió en La Victoria, Valle, y lamentablemente ahora llega la noticia de mi hermanito. Era una gran persona, un buen padre. Trabajaba como mecánico automotriz en Bogotá y tenía tres hijos: una en Garzón y dos en Bogotá. En cuanto a nosotros, éramos siete hijos en total; con él, ya estaríamos enterrando a cuatro de ellos, además de mi mamá y a mi papá”, contó Carmenza, hermana de la víctima, entre lágrimas.
Crimen y captura
Carmenza Sánchez Montes explicó a Q’HUBO que Alexánder era oriundo de Garzón, Huila. Aunque vivió en Bogotá durante muchos años, residía actualmente en una vivienda del barrio Siete de Agosto, en la Carrera 20 con Calle 67.
Sobre el atroz crimen del que fue víctima, se sabe que Alexánder había salido a tomar unos tragos en el mismo sector la noche del jueves. Posteriormente, entre las 3 y 4 de la madrugada del viernes, dos personas de la comunidad LGBTIQ+ llegaron con él a su vivienda.
“Él salió a tomar unos tragos la noche anterior y, en la madrugada entró con dos personas a la vivienda. No sabemos si él mismo permitió la entrada de estas personas o si lo siguieron hasta su casa”, comentó Carmenza.
De acuerdo con la información preliminar, las personas que ingresaron a la vivienda de Alexánder lo hicieron con el propósito de robarle sus pertenencias y, en el transcurso del asalto, lo apuñalaron con un objeto cortopunzante.
“En el apartamento estaba todo revuelto. Alexánder estaba amordazado. Ayer, una persona de Garzón llamó a su celular y contestó otra persona diciendo que él estaba bien, pero después no hubo más noticias. Cuando intentamos llamar más tarde, el celular ya estaba apagado”, relató la doliente.
Tras cometer el crimen, las responsables abandonaron el lugar. Sin embargo, presuntamente, la conciencia de una de ellas la llevó a llamar a la línea de emergencia 123 para informar a las autoridades sobre el atroz crimen. Minutos después, la Policía fue a buscar a esa persona hasta el sector de la Zona de Tolerancia y luego acudió al lugar del crimen.
“La persona llamó a reportar el crimen. Durante la llamada, la policía localizó a la persona, fue hasta donde se encontraba y la llevó hasta la vivienda donde estaba el occiso, y aunque dijo que ella no fue la autora, sino que fue la otra persona con la que estaba, se dejó en custodia de la Fiscalía por el delito de homicidio, ya que tampoco hizo nada en ese momento para alertar a las autoridades.”, explicó una fuente oficial.
“Cuando llegó la Policía a la vivienda, informaron al dueño del edificio que debía abrir el lugar porque se había denunciado la presencia de una persona fallecida. Mi hermano, que es el propietario, le preguntó cómo era posible, ya que él había alquilado a mi otro hermano (Alexander) y que solamente vivía él allí. Al entrar, encontraron la dolorosa escena”, añadió la familiar.
En el vecindario, hay una profunda consternación por el crimen. Los familiares, en medio de su dolor, piden a la justicia que castigue con todo el peso de la ley a las responsables de la muerte de su ser querido.
“Pido que se esclarezca la muerte de mi hermano y que los responsables enfrenten la justicia. Es desgarrador que le arrebaten la vida a alguien. No es justo. Si van a robar, que lo hagan, pero que no le quiten la vida a una persona. Esto duele profundamente, parte el alma”, concluyó Carmenza.
La entrada Entró a su casa con dos personas de la comunidad LGBTIQ+ y apareció muerto con signos de tortura se publicó primero en Q’hubo Bucaramanga.